domingo, 29 de enero de 2012

Tramontana,lluvia,4 grados y yo.... corriendo

Hoy ha sido uno de esos días en los que parece que le hayan dejado los caminos a uno para poder gastarlos y pisotearlos un poco (de momento, no cobran tributos ni peajes; aunque, a este paso, no sé yo...).
Habíamos quedado a las 10:45 con @melina_cb y @xgavix para hacer una tirada larga por los caminos de Ronda del Alt Empordà. Nuria también se apuntó para estirar un poco las piernas. La verdad es que tenía muchas ganas, porque nos hemos apuntado a la media maratón de Barcelona (26 de febrero) y es importante acumular kilómetros. Además, como en todo plan de entrenamiento, hoy tocaba hacer unos 16-17 y si, además, era con un bonito paisaje y en buena compañía, pues, mejor que mejor.
Sin embargo, a las 9:30 suena el WhatsApp y, tras conversación en grupo y consenso común, se decide posponer la salida. ¿Los motivos? La "graciosa" tramontana (que, si en Figueres soplaba fuerte, por la costa, no veas), la lluvia (que comenzaba su aparición) y unos 4 grados centígrados que reforzaban la decisión.
En fin, será para otra ocasión.
Y mientras llegaban las 10, ahí estaba yo, delante del café con leche, del "cake" de chocolate que me estaba zampando y, al lado, tiradas por el suelo, las mallas largas, la chaqueta térmica, los calcetines compresivos y las Pegasus 27 que, tras tenerlas arrinconadas después de comprarme las Vomero (just do it), tienen una pinta genial: 1 año con ellas y tienen la suela mucho mejor que sus sucesoras, que, a este paso, no llegan a Semana Santa.
Pues nada, que tras un primer intento, me he preparado como merecían las circunstancias (equipo completo - equipo Comansi) y he calentado un poco. Salir a la puerta de la calle y... cáspita... la lluvia arreciaba bastante, así que, media vuelta y "pa dentro". 10 minutos más tarde, he replicado la escena y, esta vez, sí: la lluvia era menos fuerte, aunque el viento no paraba. He comprobado que el GPS tuviera señal, he estrenado las gafas del Decathlon con lente incolora, me he puesto la cinta que tapa y calienta las orejas, el mp3 a todo trapo.... y he comenzado a poner un pie delante del otro siguiendo un movimiento constante y rápido. Vamos, lo que se conoce como "correr".
La intención hoy no era hacer ningún entrenamiento "sofisticado": nada de 30 minutos a R1, 30 más a R2 para acabar a R3. La cuestión era empezar y acabar. Y que fuera lo que Dios quisiera. La ruta, circular, la suelo hacer los fines de semana, porque no hay tráfico y combina asfalto y tierra. Puede ser de 12, 14, 16 e, incluso, 20 km. Pero hoy, no podía ser de mucho.
Nada más empezar, viento en contra. Menos mal que era cuesta abajo y ha sido menos malo de lo esperado. A medida que iba pasando el tiempo, he ido entrando en calor y la chaqueta térmica (que era la primera vez que me la ponía este año) ha sido de buena ayuda. Y eso que es del ALDI. No todo va a ser de marca, que la cosa no está para tirar cohetes. Eso sí, ha sido muy resultona.
Cuando llevaba 10 minutos, la lluvia (multiplicado su efecto por el fuerte viento) ha vuelto a hacer acto de presencia de modo exagerado y eso ha hecho que las gafas hayan quedado como estorbo, ya que no veía ni a los tres ni al burro, así que han ido a parar a la cabeza, aguantadas por las patillas con la cinta que me tapaba las orejas.
Así, unos 30-40 minutos. Ha sido el peor rato. Además, empezaba el terreno "sube-baja" y el viento no dejaba de ir en contra. Cuando llego a los 5km (me los conozco porque la ruta la tengo en la memoria "flash") he querido ver si llevaba buen ritmo, porque ha sido complicado poder echar un vistazo con antelación, por los inconvenientes meteorológicos. Pero... ¡surprise! Me marca 4 segundos !!! En fin, que al estirar la manga, nada más salir, para poder cubrir la mano pues le he dado al botoncito del STOP.  Brillante deducción, ¿verdad? Demasiado CSI, quizás.
Le he vuelto a dar al botoncito que, curiosamente, también sirve para el START y he seguido tirando, sin que cambiasen un ápice las condiciones climatológicas. Viento, viento y más viento. Y claro, si, encima, llueve, la sensación conjunta es que llueve mucho más.
Total, que cuando he llegado a casa tras no cruzarme con ningún deportista aficionado, lo primero que he hecho es buscar ropa seca, sentarme y, mientras realizaba mis estiramientos obligados, ver a Nadal en Eurosport para confiar en que remontase al serbio. Qué lástima, pero qué gran partido. Al próximo que se vean las caras, le gana seguro (algo parecido a lo de Mourinho y Guardiola).
Lo más curioso de todo esto, de las penurias de los 13 km (1h:08 min. aprox.) que he hecho pasados por agua, lluvia y frío, extraigo una conclusión: cómo he disfrutado !!!
¿Será masoquismo? ¿Será idiotez, locura, pérdida de los criterios humanos del bienestar? No. Llamémosle #running (a qué mola más con el "hashtag"? Queda más "cool".
Eso sí, seguro que mi amigo Marc, que participaba en una media maratón de montaña que han tenido que suspender por el frío y la nieve a los 16,9 km (de hecho, dos personas tenían síntomas de hipotermia y han sido atendidas) se lo habrá pasado "mucho mejor".
Salud, kilómetros y, si puede ser, menos lluvia, menos viento y más grados para la próxima.
@jose_kar

No hay comentarios:

Publicar un comentario